Al concluir el año han pasado importantes acontecimientos en el rancho, desde el cambio de ubicación , al cambio dentro del propio rancho. Del querer dejarlo todo al salir del rancho hacia «el caballo de hierro», al esperar que llegue el día de descanso sin miedo al tener que volver al día siguiente.Del buscar las pastillas par poder dormir, al tener que buscar el despertador para levantarse. Mucho cambio, en lo que acontece es para bien, más tranquilidad, no entrar con el nudo en el estómago esperando «el fin del mundo», a entrar hablando del «equipo futbolero de sus amores» y preguntándome el nuevo Sheriff «que dias quieres librar». El cambio ha sido sustancial, radical, si no cambian las cosas (espero que así sea, amén).

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