En rigurosa formación, han entrado al local una brigada entera de 
repartidores de la palabra y obra del Santo.
Io già mi vedevo sotto una chiesa di legno, verniciata in bianco con una grande croce. Soltanto loro sono restati un po’ lontano, facendo una lungo elenco di café, café latte e cose del genere, formando una fila, una grande coda de gente in attesa del loro turno. Una vera sorpresa mattinale. Alcuni armati fino ai denti. Secondo posso ascoltare.
Tutto questo dopo avere fatto una prova, tentare di stare con il mucchio di radioamatori, e loro pazze domande. Non sono riuscito ad avere un coloquio con loro.
Demasiadas mentes pensadoras todas con la razón dentro, hablando lo que no saben, los que les han dicho que otros dicen que han oído. Héroes de su propia mentira, dándose la razón a sí mismos. U grupo que se debe tener a distancia prudencial por el momento. A ver que vas a hacer con un trolo, un militar retirado, un testarudo aragonés, el boss, mister pueblo y su rocambolesco pasado sobre ruedas, Houston, el americano (follaoret y solo con amigos de viajes), y unos cuantos más como el “casi concejal”, el ex-concejal, que aparecen a los postres para que se les aplauda, por cierto, lástima que ya no está el que los mantenía a raya a todos, se fue después de haber recorrido bancales, huertas, playas, bares y almuerzos en lugares donde se almuerza de verdad, y amigo a la antigua.
Con tanta amalgama de neuronas salvajes, es imposible entrar, ya no caben más en aquel local. Es una locura.
Non potrei descrivere meglio questi assurdi personaggi. Finora, resto in attesa, che la mia testa possa capirli.
Con tanto pensamiento extraño no es posible continuar. Hace falta un punto y aparte, un capítulo nuevo. Pensar algo diferente cuando pueda salir de casa, poder aguantar a el montón de decadentes personajes, que de diferentes poblados se reúnen un día para hablar de sus proezas, su momento de gloria semanal. Me repito.
Y por fin llegó Abril, en pleno Octubre.
Yayo