No me quiero ni imaginar el susto que te puede producir el ver a un ser horroso, prima carnal de Smirgol, aparecer en una habitacion de hospital, y tu allí tirada, sin ganas de nada, con mas cortes que medio kilo de chopped en rodajas, o mejor con peazo corte que pareceria un pan abierto, y ver semejante ser o cuerpo etéreo aparecer, con un oso o animal gigantesco que acabarà donandose a alguna iglesia de bien,,,, que sofoco.
Seguiré despues.
Sigo, despues de la solemne merienda. Y es que la visitante a la recien parida fué mas una pesadilla que de agradecida. Ella es asi de visceral, lo que hace tienen q saber todos q es ella la «potragonista», y es que esta sola, y seguirá sola (ojalá me equivoque, aunque no se lo merezca).Por cierto que mal queda verla salir del vehiculo motorizado que se ha comprado, como que no pega, es como un bocadillo de chopped con Nocilla, como que no por muy «underground» o lo mas «in» que me digan que es eso, que no le pega.
Por aqui mas trankilo, descansando del mundanal ruido, no me hacen falta oirlos, de echo no me hacen falta, espero que pronto para nunca.
Voy dejando despacio las pastis, para que no haga estragos, y poder volver a la bonita cueva, y ver los animalitos que por allí moran y dan su presencia con las mas ocurrentes preguntas, ayyyyy a ver si cierran pronto ese mirador, fuente de aburrimiento y bostezos. No hay lugar en el mundo que se mire mas al reloj que en ese punto geodesico.
Por cierto, que al Charly se le cae la baba.